Tras el rechazo que provocó el sorpresivo despliegue policial frente a una de las sedes de Télam, a la Televisión Pública y a Radio Nacional, el vocero presidencial minimizó lo ocurrido y dijo que sólo se trató de «un patrullero que verificó que no había ninguna anormalidad». El diputado nacional Sergio Palazzo denunció que «quieren amedrentar y acallar la voz de la prensa de los medios públicos».