Tomás González Cueto, exasesor jurídico de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), está citado a declarar mañana jueves como investigado en la causa en la que se investigan presuntas irregularidades en contratos firmados durante la presidencia de Luis Rubiales, incluidos los suscritos para la celebración de la Supercopa de España en Arabia Saudí.
Así consta en una providencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la que la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 4 de Majadahonda (Madrid), la juez Delia Rodrigo, precisa que tendrá que acudir a las 9.30 horas.
González Cueto tendrá que comparecer en sede judicial después de que el pasado abril pidiera a la juez que declarase nulas las actuaciones que llevó a cabo la Guardia Civil en su contra en el marco de las pesquisas: desde los segumientos e intervenciones telefónicas, pasando por la documentación incautada en las entradas y registros, hasta su detención.
Su defensa alegó que las intervenciones telefónicas practicadas –en las que se recogen conversaciones que dice haber matenido en condición de letrado con uno de sus clientes– vulneraban el secreto profesional y el privilegio abogado-cliente.
En un escrito aportado a la causa, al que tuvo acceso Europa Press, también afeó que la juez ordenara los pinchazos «de manera global» a todos los investigados, «sin el más mínimo atisbo de individualización», y que se le detuviera «más allá de lo estrictamente necesario».
En otro escrito, que presentó en junio, aseguró que no había facturado por partida doble a la Federación por sus labores de asesoramiento legal, ya que lo abonado a su despacho GC Legal era independiente de su labor de comisionado de control externo y aseguró que no «existía un solapamiento» entre las funciones.
LA GESTIÓN DE LA ‘SUPERCOPA’
En su escrito, la defensa indicó que el despacho participó «en el asesoramiento en la redacción de los contratos de la RFEF con SELA» –empresa pública saudí– dado que el ente federativo «carecía de expertos en contratación internacional».
Según apunto, se solicitó al despacho «asistencia» en la confección de la documentación contractual, que se prestó a través de una de las socias; una labor que «fue exclusivamente técnica, plasmando las condiciones contractuales acordadas por las partes».
Al hilo, explicó que ese primer contrato con SELA (no así la adenda posterior de 2020) no fue objeto de un informe expreso y formal por parte de González Cueto como comisionado de control externo. No obstante, añadió, su socia de Contratación Mercantil participó en el asesoramiento y él estuvo informado en el día a día de todo «no apreciándose ninguna irregularidad».